El Urola Lazti no pudo con el Romo
Una vez más, las numerosas bajas del conjunto amarillo condicionaron un encuentro en el que, en circunstancias normales, los nuestros hubiesen corrido mejor suerte
Un fin de semana más se repitió la historia: los nuestros pelean, dan la cara, pero se quedan con la miel en los labios porque al final terminan acusando el escaso banquillo con el que vienen contando a lo largo de toda la temporada.
El pasado sábado no fue una excepción, y los entrenados por Jose Manuel Ruiz volvían a afrontar un encuentro plagados de lesionados. La situación era tal que incluso algunos jugadores tuvieron que disputar minutos en posiciones totalmente desconocidas para ellos. Aun así, esa circunstancia apenas se notó durante los primeros treinta minutos del encuentro, en los que el conjunto amarillo planteó una defensa muy efectiva que causó muchos problemas a los visitantes, que una y otra vez se estrellaban contra la muralla amarilla.
Pero como a perro flaco todo son pulgas, esta vez el problema de los nuestros estuvo en el ataque, donde se mostraron incapaces de materializar la multitud de ocasiones claras de que dispusieron, la mayoría de los casos, al encontrarse con el guardameta vizcaíno, que llegó a realizar 15 paradas tan sólo en la primera mitad.
Así, con un buen balance defensivo pero desastroso en ataque, se llegó al descanso con el resultado de 10-11 favorable a los visitantes.
Tras el descanso la situación continuó igual en lo que se refiere a la faceta ofensiva, donde los nuestros seguían chocando una y otra vez contra el guardameta visitante. La diferencia, sin embargo, iba a estar en el área propia, donde la imposibilidad de hacer rotaciones, unida al cansancio acumulado, propiciaron, como es comprensible, que la defensa amarilla no engranase con la efectividad con la que lo había hecho en los primeros treinta minutos.
De este modo, las diferencias del conjunto visitante rondaron los tres tantos durante la mayor parte del segundo acto, y sólo al final del encuentro lograron inflar el marcador con varios tantos consecutivos para establecer el resultado final de 21-27.
Lo cierto es que no está siendo una buena temporada para nuestro equipo en lo que a la fortuna se refiere, ya que, a la gran cantidad de bajas por lesión de que adolecen hay que añadir que en este choque, tras lograr reducir la media de goles en contra que viene recibiendo, no ha podido mantener la de goles a favor, con la que se hubiera llevado la victoria.
La nota negativa del encuentro la pusieron los integrantes de la expedición vizcaína, tanto técnicos como jugadores, increpando al público asistente en numerosas ocasiones durante los últimos cinco minutos del choque, cuando ya tenían la victoria en el bolsillo. Se trata de actitudes y comportamientos que a nadie le gusta ver en ninguna cancha pero que, por desgracia, suceden más a menudo de lo deseado.