El Urola Lazti cae con justicia ante el Usurbil (31-36)
Los amarillos realizaron un pésimo encuentro y perdieron así dos puntos muy importantes de cara a mantenerse en las primeras posiciones de la tabla
No hay excusas que valgan para justificar lo sucedido esta tarde en el Ispilla, donde un equipo que acudía con tan sólo siete jugadores de campo se hizo con una muy merecida victoria y se acerca en la clasificación a los amarillos.
No hubo color. Ya desde el primer minuto se pudo ver sobre la cancha a dos equipos que jugaban a distintas velocidades. Los visitantes, mucho más ordenados tanto en ataque como en defensa no dieron opción en ningún momento a los locales, que se estrellaron una y otra vez contra la muralla que el Usurbil había colocado en nueve metros. No salía nada: ni los laterales conseguían ganar el uno contra uno, ni los lanzamientos en suspensión encontraban portería, no salían los cruces y no se jugó nada con los pivotes (algo que, preocupantemente, viene siendo habitual); ni siquiera la portería estuvo tan acertada como en otras ocasiones. Todo ello, unido a la dureza empleada por los visitantes en defensa y a la permisividad arbitral, propició que se llegase al descanso con el resultado de 12-16 favorable a los rojillos.
Las instrucciones dadas por el entrenador local en el descanso no sirvieron de nada, ya que nada más reanudarse el encuentro los visitantes materializaron un parcial de 0-3, lo que tiró por tierra las esperanzas de meterse en el partido del Urola en los primeros minutos de la segunda mitad. Así transcurrieron los minutos restantes, con los locales con los brazos caídos y sin ningún acierto en ninguna faceta del juego, lo que facilitó que el Usurbil hurgase en la herida, llegando a lograr una diferencia de diez tantos a falta de seis minutos, diferencia que, la gran actuación de Alain Longás desde el extremo hizo que no fuese aún más humillante. El extremo derecho local cuajó un excelente encuentro en el que destacó en ataque por encima del resto del equipo, convirtiendo en gol todos los balones que llegaban a sus manos.
Al final del encuentro, el Urola cambió la defensa y opto por una individual (siempre pensando en el golaverage), lo que convirtió el partido en un “correcalles” que benefició a los locales, que consiguieron reducir la diferencia a los cinco goles que finalmente mostraba el tanteador (31-36).
De este modo, el Urola Lazti no consigue dos puntos que le hubiesen venido de perlas para mantenerse luchando por la primera posición de la clasificación, puntos que se lleva en su zurrón, merecidamente, el Usurbil. Veremos si el equipo puede reponerse de esta dolorosa derrota y volver a sacar lo mejor de sí mismo en el siguiente encuentro que disputarán en Irún, donde se enfrentarán al Irungo Gazteak. Hay que recomponerse; estos tropiezos deben servir para levantarse con más fuerzas.